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Características
Las gramíneas ornamentales
Cuidados
Periodo de florecimiento
Características
Plantar adecuadamente
Cultivo de las gramíneas ornamentales
Espacio destinado a su cultivo:
Las gramíneas ornamentales son plantas vivaces. Las briznas —las largas y estrechas hojas— y los cautivadores pedúnculos florales con forma de espiga son sus rasgos distintivos. La mayoría de las veces, sus flores son imperceptibles. Sus variadas formas y colores hacen de estas plantas en maceta especies muy populares en los balcones y las terrazas. La mayoría de las gramíneas ornamentales se desarrollan especialmente bien al sol.
No obstante, también se prestan para su cultivo en suelo firme. Son magníficas tanto como plantas tapizantes o como espectaculares pastos gigantes. Gracias a su gran facultad de adaptación, son más bien poco exigentes. Sin embargo, no debes olvidar que las plantas prosperan mejor en aquellos lugares que les resultan óptimos.
Colocación de las plantas:
El suelo debe ser mullido y profundo. Los suelos entre ligeramente ácidos y ligeramente alcalinos son apropiados para la mayor parte de las gramíneas ornamentales. Un mantillo hortícola especial facilita la plantación en suelo firme. Las gramíneas ornamentales destacan particularmente cuando están rodeadas de helechos, hostas y de la serpentina (Liriope muscari). Un sustrato para plantas verdes y palmeras resulta necesario para trasplantar las gramíneas en una cajonera de cultivo.
Cuidar adecuadamente
Cuidados de las gramíneas ornamentales
Riego:
Al igual que las plantas con flores, las gramíneas se deben regar regularmente. Como regla general, se debe regar moderadamente, sin permitir que el suelo se seque. Antes de regar, comprueba si la tierra está todavía húmeda. Siempre asegúrate de evitar cualquier anegamiento.
Fertilización:
Es necesario incorporar los nutrientes apropiados para un buen desarrollo de las gramíneas. Conviene usar un fertilizante de liberación sostenida formulado especialmente para satisfacer las necesidades de los bambúes y las gramíneas ornamentales. Una buena fertilización brindará a las gramíneas un aporte equilibrado de nutrientes durante varios meses.
Poda:
Es necesario podar las gramíneas ornamentales en primavera, sin embargo, muchas de ellas también se pueden podar durante la fase de crecimiento. Es imperativo podar las especies seminíferas antes de que las semillas alcancen su madurez para no correr el riesgo de una propagación exagerada. La mayoría de las especies nos ofrecen nuevos retoños tras la poda.
Nuestro CONSEJO
La hierba del Japón o hierba hakone (Hakonechloa macra) puebla los bosques poco frondosos y los bordes de los bosques húmedos. Su follaje es verde claro, con rayas amarillas. Además, es arqueado, colgante, vistoso y decorativo.
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