Gusano blanco

Si al cavar en primavera te has encontrado con pequeñas larvas de color blanco amarillento o gris blanquecino, es muy probable que hayas molestado a unos cuantos gusanos blancos que se han instalado cómodamente en tu jardín. Las zonas de césped muerto que aparecen a finales del verano y en otoño también son señales claras de una infestación. A veces, puede ocurrir que pequeñas áreas de césped se desprendan del suelo como si fueran una peluca, ya que las raíces cortadas ya no lo sostienen. Esto sucede porque, para desgracia de muchos jardineros, las raíces de distintas plantas, incluyendo las del césped, forman parte de la dieta de estos pequeños gusanos.

El término "gusanos blancos" se refiere a las larvas de diversas especies de escarabajos. Algunas de estas especies son consideradas insectos beneficiosos que merecen nuestra protección, mientras que otras pueden convertirse en una verdadera pesadilla para quienes cuidan de sus jardines.

¿Qué gusanos son beneficiosos?

Si has encontrado gusanos de color grisáceo-blanco en tu compost o en madera en descomposición, puedes tranquilizarte y alegrarte por la presencia de estos en tu jardín. Las larvas del escarabajo de las rosas y del escarabajo rinoceronte son aliadas en la descomposición de los restos de plantas muertas.

¿Qué gusanos son perjudiciales?

Si notas áreas de césped peladas o flores marchitas, o si al cavar en el jardín te encuentras con gusanos de color blanquecino, es muy probable que estés tratando con unos dañinos. Estos gusanos blancos también pueden multiplicarse en el huerto o en los parterres de flores, causando un daño significativo a las plantas.

Entre los gusanos blancos que suelen habitar en el suelo y alimentarse de raíces, se encuentran los del escarabajo sanjuanero (Melolontha melolontha), el escarabajo de Junio (Amphimallon solstitiale) o los del filoperta de las huertas (Phyllopertha horticola). También podemos encontrarnos otros gusanos del suelo como los de Gusanos grises procedentes de lepidópteros (Agrotis segetum) o la Rosquilla negra (Spodoptera littoralis), los Coleópteros como los  Gusanos del alambre (Agriotes lineatus) o incluso larvas de Tipula que son dípteros. Todos ellos producen daños en el césped en estado larvario, por esta razón, las zonas de césped peladas y las flores muertas a menudo son responsabilidad de estos gusanos.

1. Escarabajo de junio (Amphimallon solstitiale)

El escarabajo de junio es un insecto nocturno que mide apenas dos centímetros de largo. Tiene un cuerpo bastante discreto en tonos marrones y amarillos, lo que hace que sea fácil pasarlo por alto. En verano, la hembra pone alrededor de 30 a 40 huevos en el suelo, de los cuales emergen los primeros gusanos aproximadamente tres semanas después.

Los gusanos tienen un cuerpo claro y ligeramente amarillento, con un cabezal rojo-marrón que los distingue. Su vida larval puede durar entre dos y tres años, dependiendo de las condiciones climáticas, y pueden alcanzar hasta cinco centímetros de tamaño. Durante esta etapa, viven en el suelo y se alimentan de las raíces de las plantas, lo que puede provocar la destrucción de grandes áreas de césped o huertos si su población se vuelve excesiva.

2. Escarabajo Sanjuanero (Melolontha melolontha)

Además de las larvas del escarabajo de junio, los gusanos del escarabajo sanjuanero también pueden causar problemas en el jardín. Este escarabajo pone sus huevos, que pueden llegar hasta 100, a unos cincuenta centímetros bajo tierra. Algunas semanas después, emergen los gusanos de color blanco-grisáceo con cabeza anaranjada y roja, que pueden alcanzar hasta cinco centímetros de longitud durante su vida larval. Durante esta etapa, que dura de tres a cinco años, los gusanos del escarabajo sanjuanero se alimentan de las raíces de césped y otras ornamentales, de las raíces de varios árboles de hoja caduca, plantas de hortalizas y arbustos frutales.
Incluso después de que los escarabajos, de un color rojo-marrón y ligeramente peludos, salen a la superficie, siguen alimentándose de plantas. Sin embargo, estos escarabajos, que miden aproximadamente tres centímetros, no se concentran en las raíces, sino que se enfocan especialmente en las hojas de los árboles de hoja caduca. Es común ver estos insectos voladores nocturnos durante el crepúsculo.

3. Filoperta de las huertas (Phyllopertha horticola)

El filoperta de las huertas alcanza aproximadamente un centímetro de tamaño. Sus élitros son de un marrón poco llamativo, mientras que el resto de su cuerpo brilla en un interesante tono metálico negro-verde. Estos escarabajos diurnos se encuentran a menudo en prados, campos o en los bordes de los bosques, donde se alimentan de las hojas de varios árboles de hoja caduca, rosales y arbustos frutales.
Como larvas, una hembra de filopertha puede poner entre 40 y 50 huevos en el suelo. Durante esta etapa, se alimentan principalmente de raíces de hierba, lo que puede arruinar completamente áreas de césped, razón por la cual son considerados uno de los mayores problemas en el jardín.

Con su cuerpo gris-blanquecino y cabeza roja, se asemejan a otros gusanos. Sin embargo, su etapa larval es notablemente más corta (suele durar un año): tras emerger en verano, los gusanos del filoperta se alimentan de las raíces del césped hasta que se preparan para invernar en otoño. A principios de primavera, se pupan y en mayo emergen como escarabajos.

Señales claras de una infestación son los grandes agujeros y los bordes de mordedura en las hojas de abedul, roble, avellano, cerezo y rosa durante mayo y junio. También se pueden observar áreas de césped desnudas y muertas que aparecen entre finales de julio y principios de octubre, las cuales a menudo se pueden levantar con facilidad.

Otra plaga que se está expandiendo lentamente por Europa es el escarabajo japonés (Popillia japonica). Este insecto, originario de Asia, probablemente llegó a Europa a través de barcos, camiones o coches.

El escarabajo japonés es considerado una especie invasora. Sus larvas, al igual que otros gusanos, se alimentan de las raíces del césped, lo que puede causar daños significativos en el césped y los prados. Además, como escarabajo adulto, también representa una amenaza para muchas plantas. Prácticamente ninguna planta escapa a su voraz apetito: lilas, arces, robles, ásteres, manzanos, hayas e incluso cultivos de maíz y patatas forman parte de su dieta, hasta unas 300 especies de plantas. Por ello, existe una gran preocupación al respecto.

Visualmente, el escarabajo japonés tiene un cuerpo verde brillante y élitros marrones, lo que lo hace parecido al filoperta de las huertas. Sin embargo, los escarabajos japoneses son un poco más pequeños y, a diferencia del filoperta de las huertas, tienen pequeños mechones de pelos blancos en la parte trasera. Además, cuando se sienten amenazados, separan un par de patas hacia los lados. Existe un plan de contingencia a nivel Nacional que lo llevan a cabo las diversas comunidades autónomas lo que incluye controles, inspecciones y medidas para la erradicación de la plaga. 

Si los gusanos o escarabajos aparecen de forma aislada en el jardín, normalmente no causan muchos problemas y sus daños son limitados. Sin embargo, cuando hay un desequilibrio, la situación puede empeorar rápidamente. Si estos insectos se multiplican, pueden llegar a defoliar árboles enteros o arrasar áreas de césped, despojándolas de sus raíces. Por eso, si al cavar encuentras muchos gusanos o durante el verano notas un aumento de agujeros en las hojas, es importante estar alerta. Para combatir los gusanos, puedes colgar trampas específicas con feromonas que atraen a los escarabajos voladores y así controlar la población adulta, disminuyendo la puesta de huevos y futuro desarrollo de las larvas. Si las larvas ya están presentes en el suelo, una buena opción es tratar el área con nematodos específicos, como el Heterorhabditis bacteriophora. Estos nematodos son muy efectivos, especialmente si buscas controlar gusanos blancos en el césped. El momento ideal para aplicarlos depende del clima y del tipo de larvas que tengas. En general, es clave que el suelo esté caliente y siempre húmedo, ya que los nematodos necesitan esa humedad para moverse y sobrevivir.

También se puede combatir los ejemplares adultos con un insecticida como COMPO Insecticida Polivalente a base de Deltametrina, e incluso pulverizar directamente sobre el suelo para intentar ejercer cierto control sobre la larvas.

Otra opción en pequeñas superficies o plantas en maceta, es desenterrar y recoger los gusanos blancos a mano, o incluso retirar toda la tierra y reemplazarla con un substrato de buena calidad. Después de eso, es importante seguir algunas pautas de prevención para evitar que el problema vuelva a surgir.

Para mantener la tranquilidad incluso después de combatir exitosamente a estas pequeñas plagas, es conveniente tomar medidas preventivas. Dichas medidas varían un poco según el lugar en el que se encuentren los gusanos blancos. 

Gusanos blancos en el césped: ¿Cómo prevenirlos?

La mejor defensa contra los gusanos blancos es un césped fuerte y saludable, con una capa de pasto densa que impida que estas plagas encuentren sitios donde establecerse. Las hembras suelen buscar áreas despobladas o con menos cobertura de césped, especialmente en suelos secos y arenosos, para excavar y poner sus huevos. Por eso, es importante reparar rápidamente cualquier hueco en el césped. Para ello, COMPO Semillas Césped Repoblador Express es ideal, ya que contiene semillas de alta calidad que facilitan la reparación y repoblación de áreas despobladas.

Es importante no olvidar el riego y la fertilización regular. Las áreas sin césped suelen aparecer cuando el terreno no recibe suficiente agua o nutrientes, dejándolo débil y susceptible a plagas. Para fortalecerlo, se recomienda en primavera un fertilizante de larga duración, como el COMPO Abono Césped Larga Duración, que nutre el césped hasta por cuatro meses. 

Además, el escarificado anual puede hacerle la vida difícil a los gusanos blancos y, al mismo tiempo, fortalecer el césped, al igual que airear el suelo que permite que las raíces reciban más oxígeno y el suelo esté menos compactado. Con estas medidas, el césped se vuelve menos atractivo para los gusanos blancos, ¡y tu podrás disfrutar de un césped saludable a largo plazo sin preocuparte por estas plagas!

Prevención de gusanos blancos en el huerto

En el huerto, durante el otoño, después de la cosecha, una buena forma de inquietar a los gusanos blancos es mover y airear bien la tierra. También es recomendable hacer esto en primavera, antes de replantar. Otra estrategia es utilizar ajo para ahuyentar a estos gusanos; simplemente plántalo entre las hortalizas. Además, es importante revisar las hojas con regularidad en busca de escarabajos. Si encuentras algunos, puedes recogerlos a mano o colocar una trampa de feromonas para determinar si realmente hay una plaga, ya que en pequeñas cantidades los escarabajos son bastante tolerables.

Prevención de gusanos blancos en el jardín floral

Si tienes un jardín de floral, también es útil realizar un arado regular. Además puedes plantar especies como la espuela de caballero (Delphinium) o geranios, cuyas raíces son tóxicas, para ayudar a evitar una proliferación excesiva de gusanos blancos.

En un jardín que busca ser lo más natural posible, a menudo algunos habitantes del lugar te ayudarán sin que te des cuenta, permitiéndote relajarte y dejar que la naturaleza siga su curso. Por ejemplo, los gusanos blancos son un manjar para estorninos, cuervos, topos, tejones, erizos y murciélagos. Si tienes gallinas en el jardín, ¡les encantará el festín de gusanos blancos frescos!

Además, si notas que las aves están muy interesadas en tu césped, es un buen indicio de que hay algunas delicias escondidas. Sin embargo, como las aves suelen buscar su comida sin mucha consideración, pueden dejar pequeñas irregularidades en el césped. Por eso, es importante cerrar esos huecos lo antes posible para evitar que más escarabajos encuentren un lugar donde poner sus huevos. Para esto, lo mejor es usar una mezcla de semillas de césped de rápida germinación.

¡Te deseamos mucha suerte en tu jardín!