Ámbitos de aplicación:
Para rosales, rododendros, hortensias, clemátides, fresas, frutales, vides y hortalizas (excepto rábano) también para siembra preventiva.
Indicaciones especiales:
Utilizar sólo cuando sea realmente necesario. No superar la dosis de aplicación recomendada. No dejar que el abono férrico llegue a la flor. Tras la aplicación, rellenar con agua limpia.
Así se reconoce la clorosis férrica:
Las hojas pasan de verde claro a amarillo claro, las venas permanecen verdes. Comienza en las hojas más jóvenes y se extiende rápidamente a las más viejas. Sin tratamiento, las hojas mueren por los bordes.
Causas de la carencia de hierro:
Contenido excesivo de cal, fosfato o metales pesados.
Compactación del suelo
Condiciones climáticas extremas (largos periodos de frío, sequía, baja intensidad luminosa).